La comunicación es una capacidad esencial que distingue a los seres humanos de otras criaturas. En su naturaleza, la comunicación refleja el diseño y el propósito de un Dios que no solo habla, sino que también escucha y se relaciona. Como cristianos, afirmamos que Dios es el creador de la comunicación humana, un don divino que nos permite relacionarnos con él y los unos con los otros.
Dios, como el Primer Comunicador
La Biblia comienza con Dios comunicándose. En Génesis 1, Dios crea el universo por medio de su palabra: “Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz” (Génesis 1:3). Este acto de hablar demuestra que el lenguaje es una extensión de la naturaleza de Dios. A través de su palabra, Dios trajo orden al caos, vida a lo inerte y significado a la creación.
Además, Dios habló directamente con el hombre. En Génesis 2:16-17, Dios le dio instrucciones a Adán, demostrando que el lenguaje era el medio para una comunicación relacional personal con él. Esto subraya que la comunicación no es meramente funcional, sino relacional; es un reflejo del carácter de Dios, quien es en esencia un Dios relacional (Padre, Hijo y Espíritu Santo).
La Imago Dei y la Comunicación Humana
El ser humano fue creado a imagen de Dios (“a su imagen y semejanza”, Génesis 1:26-27), lo que incluye la capacidad de comunicarse y relacionarse. Este don nos permite expresar pensamientos, emociones y deseos, así como comprender a los demás. La comunicación no solo incluye palabras habladas o escritas, sino también gestos, expresiones faciales y otros modos de transmitir significado.
La comunicación también es un medio para cumplir el mandato de Dios de “señorear” sobre la tierra y desarrollarla (Génesis 1:28). A través del lenguaje, podemos trabajar juntos, construir comunidades y transmitir conocimientos de generación en generación.
El Pecado y la Distorsión de la Comunicación
Con la entrada del pecado en el mundo, la comunicación se distorsionó. En el Jardín del Edén, la serpiente usó palabras para engañar a Eva (Génesis 3:1-5). Este episodio, y otros descritos en la Biblia, muestran cómo el lenguaje puede ser usado para el engaño y la destrucción. Además, la relación entre Dios y el hombre fue afectada, y con ello, la capacidad de comunicarse con El con claridad y verdad.
Sin embargo, a lo largo de la historia bíblica, Dios ha buscado redimir la comunicación. Envío a profetas para hablar en su nombre, dio su Ley escrita para guiar a su pueblo y finalmente envió a su Hijo, la Palabra hecha carne (Juan 1:14), como el medio perfecto de comunicación divina.
Jesucristo: La Palabra de Dios
Jesucristo es la expresión máxima de la comunicación de Dios con la humanidad. En él, vemos a un Dios que no solo habla, sino que también se revela a sí mismo de manera tangible. Hebreos 1:1-2 dice: “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo”.
Jesús no solo trajo palabras de vida eterna (Juan 6:68), sino que también modeló una comunicación llena de gracia y verdad (Juan 1:14). Su ejemplo nos desafía a usar nuestras palabras para edificar, sanar y glorificar a Dios.
El Rol de la Comunicación en el Propósito Redentor de Dios
Dios ha usado la comunicación humana como un instrumento clave en su plan redentor. Desde los profetas del Antiguo Testamento hasta los apóstoles del Nuevo Testamento, el mensaje del evangelio se ha transmitido a través de palabras habladas y escritas. Hoy, la Gran Comisión (Mateo 28:19-20) nos llama a llevar el mensaje de salvación a todas las naciones, utilizando todos los medios de comunicación disponibles.
Invitación: La Importancia del Aprendizaje del Idioma Inglés
El aprendizaje de idiomas, especialmente el inglés, es una herramienta valiosa para los cristianos que desean ampliar su capacidad de comunicar el evangelio. Como idioma global, el inglés permite alcanzar a personas de diferentes culturas y contextos, abriendo puertas para el ministerio y la colaboración en proyectos misioneros. Además, dominar el inglés puede facilitar el acceso a recursos bíblicos, teológicos y educativos, fortaleciendo nuestra preparación para servir a Dios con excelencia.
El inglés no es solo una habilidad práctica; es una oportunidad para reflejar el amor de Cristo al conectarnos con otros y compartir su mensaje. Aprender y usar este idioma es una forma de participar en el propósito redentor de Dios, demostrando que cada palabra puede glorificarlo.
Te invitamos al webinar de la Escuela de Ingles Comunitario Gratuito el próximo 17 de diciembre a las 8 PM (hora de Miami). Este evento explorará cómo el aprendizaje del inglés puede ser una herramienta poderosa en el ministerio y la evangelización. ¡No te lo pierdas!
Dios, como el creador de la comunicación humana, nos llama a usar este don para su gloria. En un mundo lleno de malentendidos y palabras vacías, los cristianos tenemos el privilegio y la responsabilidad de reflejar a Cristo en nuestra manera de comunicarnos. Ya sea hablando, escribiendo o escuchando, nuestras palabras pueden ser un canal para la verdad, el amor y la redención divina.
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